Al comienzo puede presentarse sangrado en un momento del mes en el que no se espera. Esto suele ser normal. En general, deja de pasar a los 2 o 3 meses. Seguir tomando las pastillas todos los días a la misma hora.

En caso de que el sangrado irregular continúe, sea muy abundante o se acompañe de otras molestias, se recomienda consultar al equipo de salud.

Si se pasaron menos de 4 horas entre la toma de la pastilla y los vómitos: tomar otra pastilla lo antes posible y continuar con las siguientes en el horario de siempre.

Si se pasaron más de 4 horas entre la toma de la pastilla y los vómitos, siguen siendo seguras y no hace falta tomar otra pastilla.

Seguir tomando las pastillas como siempre. Mientras dure la diarrea y durante los 7 días posteriores a que se vayan los síntomas, usar preservativo.

Ante la indicación de algún medicamento, es importante comentar al profesional que se están tomando estas pastillas para descartar posibles interacciones. Algunos medicamentos para el tratamiento de la tuberculosis, el VIH y algunos anticonvulsivantes pueden disminuir la efectividad de los anticonceptivos. En caso de no poder hacer la consulta, no interrumpir la toma de pastillas y usar preservativo para mayor cuidado.

La mayoría de los efectos molestos disminuyen o desaparecen en los primeros meses de uso. Pueden causar sangrado irregular, ausencia de sangrado, dolores de cabeza, cambios de humor, cambios en el deseo sexual, mayor dolor mamario, dolor abdominal o náuseas. Si son muy persistentes o intensos, consultar al equipo de salud.